DE FALLOS Y FULLEROS

Sábalos y otros peces de río:

Les mando esta nota que publiqué en Telam

 Norberto.

DE FALLOS Y FULLEROS
Por Norberto Colominas

Cuatro fallos recientes --dos nacionales y dos internacionales-- demuestran la íntima ligazón entre la justicia y los factores de poder. Veamos:

1)La absolución de los trece acusados en el caso Margarita Verón demuestra que la independencia judicial es, en el peor de los casos, una mentira, y en el mejor, una utopía, porque está visto que más importante que el derecho es el dinero (que puede comprar jueces y policías), la solidaridad mafiosa (que exculpa a delincuentes y que también incluye a jueces y policías) y la defensa de intereses corporativos. Todo indica que esta vez no se saldrán con la suya.

2)El fallo del juez de primera instancia sobre la constitucionalidad de los artículos 45 y 161 de la Ley de Medios resultó esclarecedor, porque no sólo se pronunció claramente sobre el fondo de la cuestión (dilatado durante tres años por sucesivas cautelares y otras maniobras leguleyas) sino porque además le permitió a un magistrado de rango inferior desnudar la posición de la Cámara. Cuando sea su turno, resta por ver si la Corte Suprema se pone del lado del derecho (no del Gobierno) o del lado del establishment (del que forma parte el grupo Clarín-Agea).

3)Los fondos buitre que se expresaron mediante el fallo del juez neoyorquino Griessa chocaron contra los intereses del establishment financiero de los Estados Unidos y contra el legítimo reclamo de los bonistas que participaron del canje de la deuda. Y los buitres se quedaron con hambre. La Cámara de Apelaciones de Nueva York no les dio de comer. Ahora se aguarda el fallo definitivo, que se espera favorable.

4)Los fondos buitre volvieron a perder en el Tribunal del Mar, que dispuso la liberación inmediata de la fragata Libertad y su restitución a la Argentina "sin condiciones".

Cuatro fallos, cuatro expresiones de la íntima relación entre justicia y poder. Está visto que casi siempre gana el más fuerte, y que cuando los delincuentes, las aves de rapiña o los sectores más concentrados del establishment se enfrentan con estados firmes... terminan perdiendo. Así sea.