lunes, 9 de febrero de 2015

El embajador, el espía, el fiscal y su amante



El fiscal encubridor del atentado a la AMIA durante veinte años, los primeros diez como oscuro segundón de los luego imputados y los segundos diez como líder absoluto de la “investigación” con 60 personas secundándolo, 7200 sueldos pagados por el Estado, guiado por el súper espía encubridor y probablemente cómplice del atentado a la AMIA, controlado y supervisado por la “embajada”, ha muerto.
El fiscal encubridor ha muerto por un balazo en la sien, salido de un arma facilitada por un oscuro ¿hacker?, ¿espía?, ¿amante?, en todo caso muchachito de los mandados con sueldo de gerente.
Ha muerto horas antes de su estelar presentación en el Congreso, donde seguramente iba a demostrar, por lo que se desprende claramente de las escuchas a un tal Khalil con Luis Delía, varias cosas terriblemente comprometedoras para la presidenta, a saber:
Que Luis era pro-iraní, un descubrimiento sensacional.
Que estaba bien al tanto del memorando con Irán y de todas sus vicisitudes.
Que los iraníes nos iban a dar petróleo pesado que no nos sirve a cambio de arroz que ya le vende el Sr Aranda.
Ah! y además nos enteraríamos de que Timerman (perdón Héctor) es un ruso de mierda.
De que Irán pretendía el levantamiento de las alertas rojas, y que ese ruso no pidió en ningún momento eso y por eso Khalil se enojó.
Que Khalil es el cerebro de la inteligencia iraní en América del Sur, y Luisito, que evidentemente es un gran conocedor de los aspectos comerciales y energéticos argentinos, el hombre designado por Cristina en todo este entramado encubridor.
¡¡Qué gigantesca pelotudez!!
Pero no llegó ese lunes soñado por el fiscal, y lo que llegó en cambio fue esa 22 que él o alguien accionó y arreciaron las presiones hacia su persona para que pusiera su carita rejuvenecida sin tener nada serio que mostrar. Porque lo que tampoco llegó era esa última información prometida por el súper espía encubridor, esa que lo hizo apresurarse y excitarse, quizás tanto como con el muchachito con sueldo de gerente.
¿Pero cómo la presidenta iba a encubrir algo que nunca se descubrió?, es evidente que el fiscal estaba tan flojo con su acusación a los iraníes que no pudo lograr que la justicia inglesa retuviera a uno de los imputados… ¿la justicia inglesa también es encubridora?, ¿o está infiltrada por La Cámpora?
El fiscal encubridor no quiso ir a Teherán a interrogar a los imputados, ¡qué fiscal mas raro!, no quiere preguntarle nada a los supuestos culpables… ¿o no quiso pasar vergüenza ante la Comisión de notables?
Si los que efectuaron el atentado están en el “otro mundo” como dijeron los propios israelíes (y le creemos), ¿el fiscal no lo sabía?, ¿no le dio ese dato el embajador?
Por todo eso eximimos al fiscal de ser torpe, inepto o ineficiente, por eso es encubridor, porque asumió el juego perverso de Israel y EEUU, porque nunca transitó la llamada pista siria y de los ejecutores locales, que mas que pista era evidencia.
Lo llamativo es que, esa denuncia, dictada por el súper espía y la “embajada”, que tanto comprometía a Cristina, ya no le interesa a nadie. Claro, no interesa, porque es pura mierda. Lo que interesa ahora es quien “mató” al fiscal, justo antes de presentar esa rimbombante denuncia que ahora a nadie interesa…¡qué extraño es todo!..¿no?, porque si lo “mataron” por la denuncia, ¿por qué ahora nadie se acuerda de ella?. El fiscal murió, pero su extenso y patético trabajo sigue ahí, vivito y coleando…
Tanta inmundicia es difícil de tolerar. Los 85 muertos del atentado a la AMIA, al otro día eran negociados por la dirigencia judía en pos de los intereses geopolíticos de Israel, respondiendo a esa patria que sostiene económicamente a todas las instituciones de la comunidad. Y fueron negociados por el Gobierno de ese entonces por su alineamiento automático con EEUU, por su complicidad en el tráfico de armas y lavado de dinero, fueron negociados por la Justicia corrupta, por la Policía Federal, que es cómplice o autora directa y por la SIDE , con el súper espía a la cabeza.
Todos esos factores de poder ahora se rasgan las vestiduras porque el fiscal ha muerto y señalan al gobierno con dedo acusador, entre ellos el Jefe de Gobierno y candidato presidencial que puso a la cabeza de  su policía al ¡cana encubridor del atentado! y que ahora tiene con sus dos esbirras Bullrich y Alonso la infame vanguardia de la desestabilización…¡¡qué hijos de mil putas!!
Porque Cristina fue y es la única persona con cargo legislativo/ejecutivo o judicial que se calentó realmente por saber la verdad y nunca se comió la versión jurídico-policial del atentado.
Es necesario decirlo de nuevo: Cristina fue y es la única persona con cargo legislativo/ejecutivo o judicial que se calentó realmente por saber la verdad y nunca se comió la versión jurídico-policial del atentado.
Pero las cartas están echadas y no se pueden canjear. Y menos, da para irse al mazo.
Hay que salir a demostrar que al pueblo no se lo apabulla con denuncias truchas,  suicidios forzados o marchas silenciosas.
Cuando cantamos “si la tocan a Cristina, ¡qué quilombo se va a armar!”, ¿lo decimos en serio?... porque la están tocando…. ¿no les parece?

(Nota al pie: no creemos que haya que respetar a los muertos, creemos que mas bien hay que respetar a los vivos, al pueblo y fundamentalmente a la Patria, cosa que no ha hecho ninguno de estos personajes siniestros que se alimentan de sus propios desperdicios)