Estamos de
pié, no de rodillas. Estamos de pié todos los que amamos profundamente a la Patria y al pueblo. Y mas
de pié que nunca, nuestra presidenta y conductora.
Los que
están de rodillas son los empleados de Magnetto, todos, del primero al último,
que son siervos viles de la antipatria. Todos del primero al último,
mercenarios cipayos, mal paridos que pretenden destruir la democracia, doblegar
la voluntad popular y sumergir al país en el caos y la violencia, por acción u
omisión.
De rodillas
ante el Imperio están los dirigentes serviles sin alma, los que sólo piensan en
sus negocios y en su figuración mediática, de rodillas están los que engañan al
pueblo con sus mentiras y operaciones. De rodillas y lamiendo el culo del amo,
que los recibe amablemente en la
Embajada.
De rodillas
están ellos, no nosotros. Están, estuvieron y estarán de rodillas, porque no
tienen ni una pizca de dignidad, ni un ápice de amor a la Argentina.
Ellos
vienen doblegándose desde hace 200 años, son lo que recibieron felices a los
ingleses invasores, los que capitularon en la guerra con Brasil, los que
mataron a Dorrego, los que traicionaron a los caudillos federales, los que
destruyeron al Paraguay, los que negociaron una y otra vez con el Imperio
Británico, los que voltearon a Perón, los que endeudaron al país y sembraron el
terror, los que rifaron el patrimonio nacional, esos siempre estuvieron de
rodillas, lamiendo el culo del amo de turno.
A nosotros
nos han matado, nos han derrotado, nos han proscripto, pero nunca nos pusimos
de rodillas.
Nosotros
estamos y estaremos de pié. Y peleando. A como sea para defender lo que hoy
tenemos.
Cuidado, no
se confundan, ustedes son los genuflexos. Cuidado.
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